viernes, 4 de febrero de 2011

MOGAMBO


La película trata sobre un tipo duro que vive en la selva matando monos y al que acosan 2 mujeronas panchas. Hasta ahí correcto, el problema surge cuando el tipo en cuestión no es nada más y nada menos que el de la foto. Hollywood, ¿a qué estamos jugando? en serio, de que cojones vais? un ser con esas pintas no puede zumbarse a esas perracas por mi malote que sea él y por muy zorras que sean ellas, que eso no lo discuto. Vale que ese bigote se llevara en los 50 y que muestre continuos detalles de dureza a la altura del peor de los bakalas, pero seamos serios, el pollazo en la boca no se lo quita nadie.
La pregunta es: un personaje de esta guisa (en adelante, el fucker) ¿a quién se puede folletear? hablamos de alguien que vive en mitad de la selva con la única compañia de 2 nativos machos y que tiene un zoo con gallinas, ovejas y monos....blanco y en botella. Una vez respondida esta pregunta (indispensable para hacer una crítica cinematográfica con sentido), podemos catalogarla como una de las mayores ficciones delos años 50. Ok, asumido esto, vayamos a su contenido.
El entramado comienza cuando el fucker recibe la visita de una morenaza. Esta mujer es un poco zorra, muy maja, pancha, hecha así misma, una superviviente....un pibón. Inexplicablemente, se enamora del fucker; digo inexplicable porque una mujer de este perfil prefiere el troncho potente de cualquier nativo. Tras caer en las redes del fucker, aparece una pareja de frikis (en adelante, la rubia y el pringao) en busca de turismo de aventura. Como quién no quiere la cosa, en cuestión de minutos, la rubia se enamora del fucker. No doy crédito. La rubia es una mojigata, una estrecha, la típica niña buena que te aparta la mano cuando intentas tocar papo. Aquí, el director ha sabido captar muy bien la dualidad de ciertas mujeres, una santa de cara a la sociedad, pero un putón en la intimidad que engaña a su marido. Dicho esto, el fucker se decanta por la rubia, cosa que no entiendo, la morenaza es más simpática y está más potente, pero bueno que se puede esperar del orejas. Al final un jaleoooo, la rubia se pone celosa (encima que le pone los tochos al marido, échale huevos) y se vuelve loca, la lía a tiros con el fucker, ahí es nada, y parecía tan buenecita (otra vez la dualidad santa/zorra). Total, la pareja friki vuelve a su casa como si nada, el fucker vuelve a la realidad con sus gallinas, y la morenaza termina con los nativos. Un final feliz para todos.


"...alpargata de hojalata
castor desdichado
textura ambigua
oh, cienpies...."

1 comentario:

  1. Me ha gustado mucho esta crítica, pero ¿para cuándo una crítica implacable a ese mojón llamado Lost? ¿Esa serie de la que algunos éramos fans absolutos y que se basaba en "ahora no entiendes nada, pero ya te lo explicaremos más adelante", y al final no explicaban nada porque nada tenía sentido? ¿Alguien sabe dónde se puede denunciar a sus creadores por daños y perjuicios? Saludos!

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